jueves 21 de junio del 2012 | 15:34
Internacional
Unidad especial de la Policía se amotina exigiendo aumento de salario en Bolivia
AFP-AP | LA PAZ
LA PAZ.- Policías bolivianos amotinados muestran sus
armas dentro del cuartel de la Unidad Táctica de Operaciones
Policiales).
Policías sindicalizados se amotinaron este jueves en
Bolivia y tomaron por la fuerza una unidad clave antidisturbios a pocos
metros del palacio presidencial, mientras media docena de unidades en
todo el país estaban acuarteladas por reclamos salariales al gobierno de Evo Morales.
"Nuestros
camaradas se están amotinando, se están acuartelando", dijo el líder
del sindicato de policías de bajo rango, sargento Edgar Ramos, en una
improvisada declaración de prensa en la unidad antimotines UTOP, bajo
control de los sublevados.
En la
UTOP (Unidad Táctica de Operaciones Policiales) se registraron
violentos choques con palos y puños entre los mismos uniformados, a
media cuadra de la Plaza de Armas donde se halla el presidencial Palacio Quemado, con
el saldo de tres heridos, según imágenes de televisoras locales.
El
gobernante Evo Morales no se encuentra en su despacho, pues asiste a la
Cumbre de desarrollo sostenible de la
ONU Rio+20 en Brasil, y todas las instalaciones de la casa de
gobierno cerraron sus puertas, ante la ausencia de vigilancia oficial.
"¡Estamos
llamando al motín, se están amotinando!" los policías, dijo a gritos
Guadalupe Cárdenas, líder de un sindicato de esposas de policías, que
participó de la toma del cuartel policial UTOP.
El sargento Ramos
aseguró que "tenemos información de que se está suspendiendo la
vigilancia en las calles en todo el país". Medios locales señalaron que
no había vigilancia policial en seis de las nueve principales ciudades
del país.
Resguardo militar
El
presidencial Palacio Quemado y la sede del poder Legislativo quedaron
sin vigilancia policial. El Palacio de Gobierno "cerró sus puertas y no
hay atención", informó la oficina de comunicación presidencial, mientras
que el canal privado de televisión 'PAT' filmó a militares en sus
interiores armados con fusiles.
Entre tanto, esposas de los
policías tomaron este jueves los comandos departamentales de Potosí (suroeste) y Cochabamba (centro), mientras que un
total de 50 mujeres están en huelga de hambre por la causa salarial
desde el miércoles.
En otras ciudades, como Oruro (sur), Sucre (sureste) y Tarija
(sur), los policías no salieron a patrullar, dijo más temprano el
sargento Ramos.
Los policías reclaman un salario mínimo de 2.000
bolivianos (unos 287 dólares y casi el 70% más de lo que reciben), la
jubilación con el 100% de sus salarios y la anulación de una ley que les
prohíbe opinar públicamente.
Los incidentes en la unidad
antimotines UTOP estuvieron cerca de un enfrentamiento a tiros, pues
unos 70 agentes rebeldes que ingresaron por la fuerza y otro centenar
que resistía en su interior chocaron sin control e incluso televisoras
locales mostraron a algunos de ellos exponiendo sus armas para
amedrentar.
Los rebeldes se apropiaron asimismo de una docena de
fusiles y metralletas, además de abundante munición, que se encontraba
en una vagoneta en el patio del cuartel.
Se lanzaron mutuamente
piedras y bombas lacrimógenas antes de que el cuartel quedara bajo
control de los amotinados: algunos de los que resistían se pasaron a sus
filas y la cúpula decidió abandonar la unidad.
"Estamos
investigando lo que ha pasado, han visto que gente infiltrada ha
participado de todo esto", dijo en una calle del centro de la ciudad, a
pocas cuadras de UTOP, el comandante departamental coronel Rosalío
Alvarez.
El suboficial Edgar Ramos dijo que hay unos 500 policías
amotinados en varias unidades. El comando nacional de la policía
respondió que dará informes oficiales más tarde.
Alzamientos anteriores
No es la
primera vez que sargentos y clases se amotinan por mejoras salariales.
En febrero de 2003 un motín de la Unidad de Tácticas derivó en
enfrentamiento armado con militares de la guardia presidencial.
Entonces
murieron 19 personas en su mayoría policiales, tres militares y algunos
civiles. Ese conflicto detonó en octubre de ese mismo año una revuelta
popular que obligó al presidente Gonzalo Sánchez de Lozada a renunciar y
huir del país tras la muerte de 63 manifestantes.
No hay comentarios:
Publicar un comentario